El municipio de Ciudad Fernández se encuentra prácticamente en la frontera entre una zona de matorral y una zona de selva seca, esto nos ha llevado a ser un municipio con problemas de sequía extrema. Y a medida que avanza la urbanización, el calentamiento global y la falta de agua por el uso excesivo y la sobreexplotación del acuífero del Valle del Rioverde debemos generar estrategias para evitar llegar a un daño irreversible en nuestras reservas hídricas.
Por esta razón como sociedad y como seres que predominan el planeta debemos ser conscientes que es nuestra responsabilidad cuidar el vital líquido no solo para las personas, sino también para todos los seres vivos que habitan el planeta.
El agua es un líquido esencial para cualquier tipo de vida y es además indispensable para cualquier actividad, por esto debemos cuidarla y hacer uso razonable de ella.
El agua constituye más del 70% del cuerpo de la mayoría de los organismos, e interviene en la mayor parte de los procesos metabólicos que se realizan en los seres vivos.
Dada la importancia del agua para la vida de todos los seres vivos, y debido al aumento de las necesidades de ella por el continuo desarrollo de la humanidad, el hombre está en la obligación de proteger este recurso y evitar toda influencia nociva sobre las fuentes del preciado líquido.
Las aguas subterráneas son invisibles, pero sus efectos se aprecian en todas partes.
Escondidas bajo nuestros pies, las aguas subterráneas constituyen un tesoro oculto que enriquece nuestras vidas. En las zonas más áridas del planeta, pueden ser la única fuente de agua al alcance de la población.
Casi la totalidad del agua dulce en forma líquida del mundo es agua subterránea, y representa la base del suministro de agua potable, los sistemas de saneamiento, la agricultura, la industria y los ecosistemas.
En muchos lugares, las personas sobreexplotan y contaminan las aguas subterráneas como consecuencia de sus actividades. En otros, simplemente desconocemos la cantidad de agua que se esconde bajo tierra.
Las aguas subterráneas desempeñarán un papel fundamental en la adaptación al cambio climático. Tenemos que trabajar juntos para gestionar de forma sostenible este preciado recurso.
Aunque quizá nos podamos ver las aguas subterráneas, eso no quiere decir que no debamos preocuparnos por ellas.
¿Qué son las aguas subterráneas?
Las aguas subterráneas se encuentran bajo tierra, en los acuíferos, que son formaciones geológicas de rocas, arenas y gravas que contienen cantidades importantes de agua. Tras alimentar manantiales, ríos, lagos y humedales, las aguas subterráneas finalmente se filtran a los océanos. Su principal fuente de recarga es la lluvia y la nieve que se infiltran en el suelo. Las aguas subterráneas pueden extraerse a la superficie por medio de bombas y pozos.
Lo más importante que tienes que tener en cuenta es:
- Las aguas subterráneas son invisibles, pero sus efectos se aprecian en todas partes.
- Casi la totalidad del agua dulce en forma líquida del mundo es agua subterránea, y representa la base del suministro de agua potable, los sistemas de saneamiento, la agricultura, la industria y los ecosistemas.
- Lo que hacemos en la superficie repercute bajo tierra. Los únicos productos con los que debemos tratar los suelos deben ser inocuos y biodegradables, y debemos utilizar el agua con la mayor eficiencia posible.
- Las aguas subterráneas desempeñarán un papel fundamental en la adaptación al cambio climático. Debemos estudiarlas y protegerlas, tratando de encontrar un equilibrio entre las necesidades de las personas y las del planeta.
Tú como usuario puedes contribuir a tener buenas costumbres cívicas y/o ecológicas, sigue los siguientes consejos que te brindamos para que desarrolles en ti una formación sobre el cuidado del agua que incluso te motive a compartir con toda tu familia y amigos.
Darnos duchas cortas, cerrar las llaves mientras nos enjabonamos y colocar una cubeta para reutilizar el agua fría.
Es mejor bañarnos en la regadera que en la tina, así ahorramos 7,300 litros de agua al año.
Lavarnos los dientes utilizando solo un vaso y enjuagar el cepillo con poca agua.
Nunca barrer con la manguera y evitar que los niños jueguen con ella.
Usar la lavadora, el lavavajillas con la carga máxima y reutilizar las aguas grises de la casa para riego o w.c.
Revisar las fugas en el W.C. poniendo especial atención en el flotador y el sapo; puedes aplicar colorante en el tanque y si pasa agua teñida cuidado ¡existe fuga!
Evitemos lavar los trastes y alimentos bajo el chorro del agua.
Utilizar sólo una cubeta con agua para lavar el automóvil.
Revisar y cambiar los empaques que se encuentran rotos o desgastados ya que una pequeña fuga que produzca una gota por segundo, supone un desperdicio de 4,320 litros de agua al año.
No utilizar el inodoro como basurero ni cenicero.
Instalar en el tanque del sanitario una botella con agua para reducir el volumen de una descarga.
Asegurarnos que todas las llaves estén siempre bien cerradas.
Regar las plantas y jardines por la tarde o por la noche, solo cuando sea necesario.
Instalar dispositivos ahorradores.